El Otocinclus es un pequeño pez de agua dulce muy popular en la acuariofilia, conocido por su increíble capacidad para limpiar algas y por su temperamento tranquilo. Pertenece a la familia Loricariidae, al igual que los plecos y las cuchas, y es originario de los ríos de Sudamérica. A continuación, te dejo una descripción completa:

Tamaño: Alcanza entre 4 y 5 cm en la adultez.

Coloración: Su cuerpo suele ser de color marrón claro o gris, con una franja oscura que recorre todo el lateral del cuerpo desde la cabeza hasta la cola.

Cuerpo: Alargado y delgado, con una boca en forma de ventosa adaptada para adherirse a superficies y raspar algas.

Aletas: Pequeñas y discretas, adaptadas a la vida en corrientes suaves.

Condiciones del Agua:

Temperatura: Entre 22 y 28 °C.

pH: Entre 6.0 y 7.5.

Dureza: Blanda a moderada, entre 2 y 12 dGH.

Oxigenación: Prefiere aguas bien oxigenadas y limpias.

Acuario Ideal:

Tamaño mínimo: 40 litros para un pequeño grupo.

Decoración: Plantas naturales, troncos y rocas donde pueda esconderse y buscar algas.

Sustrato: Arena fina o grava suave para no dañar su abdomen.

Iluminación: Moderada, ideal para el crecimiento de algas verdes que forman parte de su dieta.

Alimentación: Dieta: Principalmente herbívora, con especial preferencia por las algas.

Alimentos recomendados:

Algas naturales en el acuario.

Pastillas de espirulina o wafers para peces de fondo.

Verduras hervidas como calabacín, pepino o espinaca (en pequeñas porciones).

Frecuencia: Se alimenta de manera constante durante el día, raspando superficies.

Comportamiento:

Temperamento: Muy pacífico, ideal para acuarios comunitarios con peces tranquilos.

Actividad: Mayormente diurna, pasa gran parte del tiempo adherido a superficies como plantas, troncos o cristales, alimentándose de algas.

Sociabilidad: Es un pez de cardumen, se siente más seguro y cómodo en grupos de 5 o más individuos.